Mini guía para poner límites

 

Mira a tu alrededor. ¿Ves alguna puerta? ¿Alguna pared? 

Los límites físicos son claros en indicarnos un punto de separación entre un espacio y el otro.

Con los límites emocionales, no es tan simple. Para establecerlos, primero debemos tenerlos claros nosotr@s y luego hacérselos saber al resto de las personas.

La práctica de poner límites es algo que se ensaya a prueba y error. Porque lo que se practica, se refuerza. 

 

Con esta mini guía te propongo comenzar a practicarlos. Disfruta este descargable gratuito.